Noticias Jurídicas

01/12/2015

Cómo justificar despidos por incumplir el código ético

Pfizer ha justificado el despido de 30 directivos en una supuesta infracción del ‘compliance’ o código interno de la compañía. La reforma del Código Penal incentiva que las empresas actúen en estos casos.

La decisión de la farmacéutica Pfizer de despedir a 30 de sus directivos en España ha levantado un gran revuelo. Se trata de una medida llamativa por el número de afectados, por el cargo que ocupan y también porque se ampara en el incumplimiento de las normas de compliance, o el código ético interno, por parte de los directivos.

El origen del caso está en un exempleado que, tras ser despedido, tiró de la manta informando a la matriz sobre actuaciones irregulares en la empresa relacionadas, al parecer, con pagos irregulares a médicos, aunque algunas fuentes apuntan a otras infracciones en la comercialización de un fármaco. Se trata de una conducta sensible en el sector: el código ético de Farmaindustria establece normas muy estrictas con el fin de evitar que los regalos de los laboratorios lleven a los profesionales a prescribir un medicamento determinado. El incumplimiento del código se persigue desde un punto de vista deontológico, pudiendo concluir con una sanción a la empresa.

También la Ley del Medicamento prohíbe expresamente el ofrecimiento de incentivos a profesionales sanitarios para los laboratorios. E incluso podría entrar en juego el Código Penal, ya que, en los casos más graves, podría hablarse de delitos de soborno, cohecho o corrupción entre particulares.

‘Compliance’

Estos despidos llegan en un momento en el que las empresas están concienciadas sobre la importancia de contar con una política de cumplimiento normativo, tras la reciente reforma del Código Penal. Según explica Fernando Lacasa, socio del área de Forensic de Grant Thornton, “la inclusión de la responsabilidad penal de la persona jurídica en nuestro ordenamiento está propiciando que las empresas sean más responsables en la respuesta a los abusos y delitos cometidos por sus empleados, ya que dificulta que pueda dejarse salir al empleado por la puerta de atrás como si nada hubiera pasado”.

En este sentido, señala que “la norma incentiva que la empresa denuncie los hechos y aporte investigaciones sobre lo sucedido, a través de los atenuantes”. Y añade que “el despido de los empleados que la empresa considera implicados suele obedecer a la coherencia de la compañía al descubrir la comisión del delito y denunciarlo ante las autoridades”.

Códigos éticos

Al margen de los despidos de Pfizer, acudir a los códigos éticos para justificar despidos disciplinarios ha sido una tendencia al alza durante los años de crisis. Las empresas han mirado con lupa estas normas internas para encontrar incumplimientos que justifiquen un despido procedente ahorrándose así indemnizaciones millonarias.

Eso sí, una vez que el caso llega a los juzgados, se debe demostrar que el directivo conocía la existencia del código ético, ya sea mediante la firma del documento o con un “acepto” en la intranet de la compañía. Algunos expertos apuntan que la proliferación de webs internas corporativas ha hecho que aumente el número de códigos éticos que se firman sin leer. En cuanto a la sanción que se imponga, debe ser proporcional al incumplimiento, reservándose la medida del despido para los casos más graves. En ocasiones, el despido fulminante sin que haya habido sanciones previas al trabajador puede comportar la declaración de improcedente al no aplicar la empresa la teoría gradualista de las sanciones.

En el caso de los directivos de Pfizer, fuentes del sector apuntan que, aunque el despido disciplinario esté justificado, la empresa podría intentar alcanzar un acuerdo con sus exempleados y así evitar los tribunales y que una sentencia refleje una mala praxis de la compañía.

Normas de conducta

  • Los códigos éticos imponen reglas de comportamiento que enlazan con el poder de dirección y organización del empresario.
  • Su incumplimiento puede implicar una transgresión de la buena fe contractual.
  • Los límites están en el respeto a los derechos fundamentales, la legislación vigente, la negociación colectiva
  • o lo establecido en el contrato.

Casos que han llegado a los tribunales

La Justicia ha analizado casos en los que en medio de un proceso por despido sale a relucir el código ético. Un caso curioso fue el de una compañía a la que un juzgado afeó que se amparara en el código ético para despedir a una trabajadora cuando la propia empresa no lo cumplía, ya que la Seguridad Social le reclamaba 43,2 millones de euros, atribuyendo a sus directivos “gastos en mariscadas, viajes y demás derroches injustificados e injustificables”. La barrera del idioma también ha jugado a favor de los trabajadores: el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Madrid consideró improcedente en 2010 el despido de una trabajadora porque la norma interna estaba redactada en inglés. En 2007, el Supremo dio su visto bueno al código de conducta del Banco de España que obliga a los trabajadores que “tengan o puedan tener información privilegiada” a declarar anualmente sus operaciones financieras. Y el TSJ de Cataluña aceptó el despido de un trabajador de una marca de automóviles por vulnerar la normativa de recursos humanos al vender los coches que adquiría con mejores condiciones por ser empleado, sin respetar el período de un año desde la compra que exigía la empresa.

Fuente: Cómo justificar despidos por incumplir el código ético

Foto del avatar  Hispacolex

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *