Noticias Jurídicas

11/11/2013

El Supremo anula el indulto al conductor ‘kamikaze’ de Valencia

La Sala de lo Contencioso-Administrativo del Supremo ha anulado, después de tres días de intensa deliberación, el indulto concedido por el Gobierno a Ramón Jorge Ríos Salgado, condenado a 13 años de prisión por delitos de conducción temeraria, homicidio y lesiones. El indulto le conmutó esa pena -de la que tan sólo cumplió 10 meses- por una multa de 4.380 euros.

Según ha dado a conocer el Tribunal, la ejecución de la sentencia, que se dará a conocer en los próximos días, queda en suspenso durante tres meses al objeto de que el Gobierno pueda, en su caso, subsanar los defectos que han motivado el fallo del Pleno de la Sala Tercera.

La medida de gracia no tuvo el respaldo ni de la Audiencia de Valencia, que juzgó los hechos, ni del fiscal. Su concesión generó una enorme polémica social y política e incluso el ministro del Interior, Jorge Fernández, se manifestó en tono crítico al señalar que el indulto a Ríos era “un caso excepcional” que ponía de manifiesto que “en el futuro” el Ejecutivo “tendrá que estar más atento a algunas cuestiones”.

De acuerdo con los hechos probados de la sentencia dictada en enero de 2011 por la Audiencia valenciana, en la tarde del 1 de diciembre de 2003 Ríos se introdujo en la autopista A-7 en dirección contraria y condujo “a gran velocidad” durante cinco kilómetros.

Nueve conductores que se cruzaron con él lograron esquivarle, pero el coche que pilotaba José Alfredo Dolz, de 25 años, que en ese momento se encontraba efectuando un adelantamiento correcto, no pudo evitar la colisión frontal. El joven falleció y su novia, con la que viajaba, resultó herida.

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La hermana del joven fallecido en 2003 en un accidente causado por un conductor que circulaba en sentido contrario en la AP-7, en Polinyà de Xúquer (Valencia), Loreto Dolz (2 i), junto al abogado de la familia y la presidenta de la Asociación Stop Accidentes, Ana Novella. (Fuente: Efe)

La Audiencia descartó la epilepsia

La Audiencia descartó que el comportamiento de Ríos se debiera a una crisis epiléptica (algunos indicios que apuntaban hipotéticamente a esa enfermedad aparecieron dos años después del accidente) y declaró que cometió los hechos criminales “de forma deliberada”. El Supremo confirmó en su integridad la condena.

La familia del fallecido, que ha sido la que impugnó el indulto, puso de manifiesto que el abogado del indultado fue Esteban Astarloa (hermano del diputado del PP y ex alto cargo del Gobierno de Aznar Ignacio Astarloa), socio del bufete Uría y Menéndez, en el que trabaja un hijo del actual ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón.

Tanto desde el Ministerio como el propio ministro se explicó que este letrado no tuvo ninguna relación con el indulto al conductor kamikaze, que no estaba en España cuando se produjo la tramitación y además trabaja en el área Mercantil del bufete, no en Penal.

Las explicaciones se produjeron después de que el PSOE solicitara a la Fiscalía que investigase si se había producido tráfico de influencias en la concesión de esta medida de gracia por parte del Gobierno

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